Échale un vistazo a los productos que tienes en el baño. Lee el listado de ingredientes e intenta descifrarlo. Tranquila, no estás sola amiga. Si los has leído y te has quedado igual, es normal.

Listados de nombres complejos y enrevesados y que no sabemos distinguir. En resumen, ¿qué tenemos en el baño? Vamos a dar respuesta a parte de esta gran incógnita.

A continuación, te explicamos cuáles son los ingredientes más perjudiciales que puedes encontrar en la cosmética capilar.

Antes de nada, te diremos que todos los productos de Rulls son cosmética natural y vegana, libre de sulfatos, siliconas, alcoholes secantes y cualquier otro ingrediente perjudicial para tu melena. Los rizos nos adoran. Dicho esto, continuamos. 

Las siliconas, utilizadas con frecuencia en champús y acondicionadores, son ingredientes de síntesis que tienen dos funciones principales. Por un lado, hacen que el producto se deslice mejor por el cabello facilitando así su aplicación y por otro aportan brillo y suavidad. Entonces, si todo son ventajas, ¿dónde están los peros? Aquí van:

Los champús con siliconas se adhieren a la fibra capilar, dando ese aspecto de brillo y suavidad.

Pero es sólo un efecto óptico, ya que en realidad están bloqueando las hebras del cabello y a medio y largo plazo, esto perjudica a tu melena, debilitándola y haciéndola más quebradiza.

Y para que no te tomen el pelo (¡juas!), puedes saber si un producto contiene siliconas en su formulación si entre sus ingredientes encuentras alguno de estos: dimethicone, cyclopentasiloxane, dimethiconol, phenyl trimethicone, amodimethicone, cyclomethicone o algún otro que termine en el sufijo -cone, -conol, -silane o -siloxane.

Otro gran enemigo de tu melena son los sulfatos. Se trata de ingredientes muy comunes en los productos capilares. Su función es la de limpiar el cabello y son los responsables de que los productos que utilizamos, como el champú o el acondicionador, generen espuma. El problema es que cumplen demasiado bien con su función.

Los sulfatos arrastran las proteínas naturales del pelo, así como otros aceites que se dan naturalmente en él.

Como consecuencia el cabello se debilita, pierde cuerpo y se vuelve opaco, sin brillo (pero bueno, para disimularlo ya están las siliconas). Los sulfatos también producen sequedad, picor y en ocasiones caspa, cuando el cuero cabelludo es más sensible.

El más empleado de los sulfatos es el Sodium Laureth Sulfate y es mucho más común de lo que pensamos. Algunos productos similares que también deberíamos evitar en nuestras rutinas son Sodium Lauryl Sulfate, Laureth Sulfate Sodium, Lauryl Sulfoacetate Sodium, Lauroyl Isethionate y el Sodium Lauroyl Taurate.

Como puedes ver, una rutina de limpieza capilar libre de siliconas y sulfatos es extremadamente beneficiosa para cualquier tipo de cabello. Es la mejor manera de asegurar la salud de tu pelo a largo plazo y la mejor forma de acondicionar tus rizos y ondas sin depender de los químicos.

¿Habías pensado pasarte a la cosmética natural? En primer lugar, ¡bienvenid@!

Y en segundo, esto es lo que tienes que saber: El combo siliconas-sulfatos elimina en exceso la grasa y el cuero cabelludo produce mas para compensar esa agresión. Por eso, dependiendo del tipo de cabello y cuero cabelludo, puede tardar varias semanas en regularse.

Un tip: Para darle un empujón al proceso de transición puedes utilizar un aceite natural en el prelavado, ya que la mayoría de siliconas no son solubles en agua, ¡pero sí en aceite!

Y en este punto es donde empieza la temida transición, pero eso es algo que te contaremos en otra entrada del blog ;)

 ¡Cuídate mucho!